En el marco del 11.º aniversario de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, colectivos y ciudadanos realizaron un homenaje en la plaza central de Tuxtla Gutiérrez, donde colocaron 43 sillas con fotografías y veladoras en memoria de cada uno de los jóvenes desaparecidos en 2014 en Iguala, Guerrero.
El acto simbólico buscó mantener viva la exigencia de verdad y justicia, recordando que, a más de una década, las familias continúan sin conocer el paradero de sus hijos ni tener acceso pleno a la verdad de los hechos. Las sillas vacías representaron la ausencia de los estudiantes, mientras que las velas encendidas simbolizaron la esperanza de que la justicia algún día llegue.
Este homenaje se sumó a las múltiples actividades que se realizan en distintas ciudades del país en torno a la fecha, bajo la consigna de “¡Nos faltan 43!”, reiterando que la memoria y la presión social siguen siendo fundamentales para evitar que el caso quede en la impunidad.
Foto: Óscar Gutiérrez / El Universal
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